1
Yo te tuve en mis brazos
Tu sin soltarte
a los míos
permaneciste
Yo sostuve tus cansancios
sin resistencia,
mientras tu aliento
se fue apagando,
el aire se fue retirando,
tu mirada se fue alejando
Yo estuve ahí
Con los cansancios del que se
está yendo y los cansancios
del que se queda
Yo te tuve en mis brazos
para despedirte
sin tristeza.
2
Un café humeante
con un toque de canela
y unas gotas de ron
achica las soledades,
le pone palabras
a los silencios,
apaciguando
las almas en penas
que todos llevamos dentro
3
El sexo sonó cansado
había irritación en el deseo
desapego en la mirada
la piel seca no hablaba.
Acorralada
la nostalgia
se refugio en los anhelos
de un tiempo que no fue.
4
El viento
se coló entre las delgadas
sombras de mis piernas
El calor se fundía
en mis pies descalzos
Los caballos cinchaban del carro
hundiendo sus patas
desenterrando las ruedas
de las fauces de la arena
hambrienta
Sudor y aroma
a caballo cansado
humedecían mi piel
El hombre allá arriba,
firme,
agitaba el rebenque
El sufrimiento no tenía espacio
De reojo
el río observaba
Con las últimas paladas
llegó
el alivio del regreso.