¿QUIÉNES SOMOS?

En la búsqueda de Alcira

por | 16 Abr, 2025

Trascendiendo espacio y tiempo, Alcira vuelve, a través de aquellos poemas que escribía y regalaba. Vuelve y nos dice que “a pesar de todo” vale la pena seguir buscando un mundo mejor, más humano y solidario.

También para recordarnos lo libre que somos cuando escribimos poesía sólo por el gusto y la pasión de hacerlo, sin miedos, sin urgencias, sin un fin utilitario ni por un lucro económico.

Alcira, soñadora de belleza y paz, de justicia y resistencia, valiente, sembradora de árboles y flores, libre…

Ahí está su VOZ:

Malgré tout

Encuentro luz ( malgré tout)
Amo ( malgré tout)
Regalo flores ( malgré tout)
Me entristezco ( malgré tout)
Me ilumino de azul ( malgré tout)
Me En- Paz- Eo ( malgré tout)

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C est la victoire de la poésie
Malgré tout          malgré tous
Malgré moi
Malgré toi
malgré lui

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El sol estalla en flor*es
En el árbol lleno de espinas
De un tronco torcido y gris
La belleza reina tranquila
Un pájaro vuela en silencio
Sus grandes alas tan libres
Se embriagan de cielo azul
Buscando otras alas…

Esquina de poesía
Por Anmar

Esquina de barrio,
silenciosa.
Por donde anduvo a su regreso, la poeta,
la del alma rota.
Extrañando.
Con su blusa amplia y pollera de colores.
Con el pelo suelto.
Soñando.
Tirando papeles al viento,
regalando poemas
que nos devuelve el tiempo.
No era primavera
Pero ella iba perfumando
el aire, de glicinas.
No era verano
Mas sus manos se iban llenando
De jazmines.
Esquina de barrio…
La de Alcira…
Esquina de poesía

¿Cómo abordarte Alcira? ¿Cómo agarrarse a lo desconocido? ¡Cuánta gente nos han quitado, nos tan tapado! Aparecen ahora los vestigios sobre el suelo de los que aquí estuvieron, intentaron ser, fueron lejos, volvieron a ser, distintos, los mismos pero otros…

Mi rastro, por vía de los Scaffo llega a ti como a todos esos “gringos”. Esos rastros ya de por sí me son difíciles. ¿Cómo llegar a ti Alcira? Me llega el dato de los doce días en un baño, a agua pura, ¿pura?, a pura agua… ¿Por dónde habrá andado tu cabeza? Al ver esa agua cercada ¿habrás pensado en el agua del Yí? Tirada en el piso frío del baño, las líneas de fuga de las baldosas ¿te habrán acercado a una fría mañana bajando rumbo al camping? ¿Cómo fluye la creación cuando estás rota? ¿Fluye? ¿O sólo fluye la canilla que gotea, rítmica y lenta, sobre la mancha oxidada de la pileta? ¿A qué se parece el ruido de las botas subiendo escaleras y pasando cerca? Contraste brutal entre tu silencio y el caminar del invasor.  Mirar los hongos del techo blanco ¿será como la vista aérea de nuestro monte? Al extrañarnos ¿te extrañabas? Al entumecerte ¿corrías en tu escuela? Al esconderte en silencio ¿te metías en el bullicio de tu recreo? Cuando te vas tan lejos ¿vuelves cada tanto? ¿Vos sabías que acá íbamos a seguir escribiendo? Si hubiese sido niño podría haber trepado con una cuerda e intentado tirarte un pan por la ventana ¡pero ni siquiera sabía dónde quedaba México! El olor húmedo ¿se parece al olor a la tierra? ¿Hoy no te peinaste? No te preocupes, igual estás bonita. Con papel se pueden hacer cuerpos en papel maché, colages o también sabrosas galletitas. ¿Podrías escribirnos ahora? De estar tanto sentada podrías explicarle a cualquier profe de matemática en qué consiste un plano. Te das vuelta, un poco más de este lado, ahora te sientas contra la pared, ahora te acuestas. Mil posiciones para mantener una inalterable. No abandonar. Y ahí aparece la pregunta bestial de Bertolt: ¿en cuánto les abandonamos si nos abandonamos? ¡que son doce días para ti si has resistido el paso del tiempo. ¡Descansa -ya vienen los compañeros- que hay mucha poesía por hacer!